El crecimiento en los tiempos del Coronavirus

Estamos en el año 50 antes de Jesucristo. Toda la Galia está ocupada por los romanos… ¿Toda? ¡No! Una aldea poblada por irreductibles galos resiste, todavía y como siempre, al invasor.

Estamos en el año 50 antes de Jesucristo. Toda la Galia está ocupada por los romanos… ¿Toda? ¡No! Una aldea poblada por irreductibles galos resiste, todavía y como siempre, al invasor.

Durante el primer semestre la inversión publicitaria cayó en España un -33,5% (i2P 1º Semestre 2020 España) y los grandes grupos publicitarios en sus estimaciones están pronosticando una caída acumulada para todo este 2020 del -25% (WPP). Este tsunami ha provocado que estos grandes grupos hayan tenido que negociar ajustes de personal que todavía no han finalizado y que muchas pequeñas consultoras independientes no hayan podido continuar con su actividad.

En medio de este panorama, hay una tribu que resiste como el pueblo de los irreductibles galos. Manteniendo el ritmo de crecimiento e incorporando equipo a la plantilla. Conseguimos crecer, pero ahora hay que adaptar la compañía y sus procesos a la nueva situación y no es fácil. The Economist publicaba durante los peores meses de la pandemia que según sus estudios el teletrabajo había sido un éxito porque los empleados mantenían lazos de confianza y comunicación creados en la etapa anterior, cuando la vida en la oficina era normal y los empleados compartían experiencias más allá de las funciones del rol de trabajo: cafés, reuniones, comidas, etc. En el confinamiento estos equipos se han podido adaptar fácil al teletrabajo. Pero una empresa en crecimiento con un porcentaje alto de la plantilla que no se conoce previamente se enfrenta a un reto: crear cultura, relación y vinculación. Así lo hemos conseguido en Apache:

Estos últimos meses hemos tenido que afrontar uno de los retos más difíciles que hemos vivido desde el lanzamiento de la tribu Apache. Tanto desde un punto de vista personal como profesional, hemos tenido que afrontar una situación para la que nunca estuvimos preparados, repleta de incertidumbre y numerosos cambios inesperados que nos ha llevado a necesitar un modelo de toma de decisiones extremadamente ágil. Para una compañía como Apache, que lleva la innovación en su ADN, estos cambios han impactado principalmente de la siguiente manera:

  1. Atracción de talento

A pesar del impacto global del Covid en el tejido empresarial, en Apache hemos mantenido nuestra tendencia de crecimiento. Entre los meses de marzo a agosto, la tribu ha incorporado a 10 nuevos miembros del equipo en diferentes áreas de la compañía. Este crecimiento ha supuesto tanto la creación de nuevos departamentos como el refuerzo de los existentes, y ha requerido una reorganización profunda de nuestro modelo de gestión de hiring tanto para localizar, incorporar y asumir todo este talento.

2. Rediseño integral del onboarding de empleado

Los primeros días, semanas y meses de nuestros nuevos indios se han llevado a cabo a través de un nuevo proceso virtual con gran éxito. Gracias al equipo de Operaciones hemos conseguido automatizar al máximo todas las tareas administrativas, consiguiendo una mayor eficiencia en el proceso de onboarding. Por otro lado, hemos incrementado el foco en que las nuevas incorporaciones se integren con el equipo existente, empujando numerosos puntos de contacto entre empleados que potencie la humanización de este proceso virtual. Hemos conseguido una incorporación natural a los grupos de trabajo entre personas que han tenido una oportunidad muy limitada de reunirse físicamente.

Tener una experiencia positiva de onboarding es vital no solo para conseguir que los nuevos miembros del equipo sean independientes y productivos en un corto periodo de tiempo, sino también para garantizar la retención de talento que a día de hoy nos permite crecer de una manera sostenible. Esta es una de las prioridades de nuestro departamento de People & Culture.

3. Redefinición del teletrabajo en la compañía

Apache siempre ha ofrecido a su equipo un modelo de trabajo flexible, con una fuerte política de Working From Home que ofrecía, entre otros beneficios, la posibilidad de teletrabajar cada viernes desde casa. Tener implementado este modelo nos procuró una gran ventaja ya que contábamos con la tecnología y metodología adecuadas para garantizar la productividad de nuestros equipos y mantener la calidad de nuestro trabajo con la llegada de esta nueva situación.

Dicho esto, pasar de un modelo del 20% de teletrabajo a una situación del 100% de trabajo desde casa, implicó un gran esfuerzo para escalar nuestra metodología interna a la nueva situación. Involucramos a todos los responsables de departamento en la reorganización de reuniones internas, así como a nuestros partners y clientes para la redefinición de los flujos externos. Gracias a la gran flexibilidad de todos los empleados, hemos sido capaces de dar un giro rápido y continuar nuestra exigencia en el control de proyectos que siempre nos ha definido como clave para garantizar la calidad de los mismos.

4. Gestión de cultura y salud organizativa

Uno de los mayores impactos de un modelo 100% basado en teletrabajo es la dificultad para mantener una cultura unificada y un sentimiento de pertenencia a la tribu. Para reforzar la unidad del equipo, en Apache montamos lo que se conoce como nuestro “Club Secreto”, integrado por voluntarios de distintos roles y departamentos. La idea es crear un grupo que propone, diseña y pone marcha actividades dirigidas a un amplio abanico de gustos.

Estas actividades han empujado enormemente al sentimiento de pertenencia y cultura que define a APACHE, pero además han aportado a la salud física y mental de toda la tribu. Actividades como yoga, campeonatos de karaoke, pictionary o las “pandemiahistorias” (anécdotas históricas compartidas por nuestro Director de Data & Analítica) generaron y mantuvieron el estado de ánimo, pautas de equipo y muchas a día de hoy tienen continuidad.

5. Adaptabilidad y flexibilidad para continuar

Somos conscientes de que esta nueva aventura no ha hecho más que empezar. Debemos estar preparados para volver a realizar los cambios estructurales que sean necesarios.

Ninguna de las decisiones que hemos tomado a día de hoy se puede considerar como definitiva, y al igual que hacemos con nuestros proyectos, debemos construir procesos de control periódicos de cara a revisar nuestros modelos y decidir si continuar o pivotar a nuevas fórmulas.

Solo aquellos que sepan ser ágiles en su decisión frente a una situación cambiante podrán salir vivas o incluso reforzadas, y es ahí, donde queremos estar en APACHE.

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